Para vivir más y mejor llevar una vida saludable es fundamental.
Cuidar de ti y de los tuyos siguiendo estas recomendaciones tendrá un impacto muy positivo en salud.
Más abrazos y menos móvil

Los abrazos: afecto físico que aporta gran beneficio a tu salud
¿Son saludables los abrazos? ¿Tienen poderes terapéuticos? Gracias a la liberación de endorfinas procedentes del cerebro, los abrazos dados por tu pareja, un amigo, un familiar o una persona conocida aportan grandes beneficios para la salud. Mucho más ahora que vivimos en un momento en el que la tecnología es uno de los principales canales para relacionarse con los demás, restando espacio y protagonismo al afecto físico entre las personas.
Principales beneficios de los abrazos:
- Físicos y fisiológicos: Aunque no te lo creas, está demostrado que los abrazos ayudan a reducir la presión arterial, la cefalea y el dolor menstrual. Además, sirven como cura para el insomnio, retrasan el envejecimiento y contribuyen a dominar el apetito. Dar y recibir abrazos mejora el sistema cardiovascular, al aumentar el nivel de oxitoxina y, también, el sistema inmune porque activa y favorece la creación de glóbulos blancos.
- Emocionales y psicológicos: La abrazoterapia ayuda a combatir el estrés y los trastornos depresivos porque fortalece la autoestima, calma los nervios y aporta alegría. Los abrazos mejoran también el estado de ánimo, aportan seguridad, protección y positivismo y permiten generar relaciones de confianza. Además, al liberar dopamina, producen una mayor motivación y aumentan la capacidad de atención, lo que fomenta el aprendizaje y la capacidad de memoria.
Abrazos en la edad infantil
El nivel de autoestima está muy asociado con el contacto físico recibido desde niños, puesto que los sentimientos experimentados en una edad temprana marcan para toda la vida e influyen en la capacidad de querernos y respetarnos a nosotros mismos. Los abrazos son imprescindibles para aportar a los niños calma, reducir el estrés y mejorar su estado de ánimo y sensación de felicidad. Además, esta terapia potencia la sensación de unión y comprensión entre padres e hijos.
En conclusión, los abrazos transmiten protección, confianza, seguridad y fortaleza. Así que apostemos por abrazar más y pasar menos tiempo enviado iconos e interactuando con los demás vía móvil.